La orientación moderna de la Cirujía Plástica tiende a que el Cirujano Plástico, más que un protagonista haciendo técnicas particulares con resultados egoístas, sea un verdadero receptor de los deseos más íntimos de sus pacientes y así plasmar en estas cirugías todo aquello que el paciente quiere, pero con la tranquilidad que le da la armonía y sin la evidencia de los estigmas de la Cirugía Plástica.
Esto quiere decir que en un buen resultado entre menos se note la mano del Cirujano Plástico, mucho mejor.
Por nuestra experiencia con personas que habitan en el extranjero, hemos desarrollado técnicas quirúrgicas especiales que disminuyen al máximo la posibilidad de complicaciones postquirúrgicas en su lugar de residencia, para nosotros una recuperación corta es suficiente para su recuperación y regreso a su lugar de origen.